Somos
Fundación Santa María de la Providencia es una institución de carácter social y terapéutico que ofrece atención a personas con capacidades diversas, es decir, a quienes, a pesar de presentar limitaciones en algunas áreas de su desarrollo, poseen habilidades que pueden ser fortalecidas. De esta manera, profesionales en diversas áreas y la comunidad religiosa (Hijas de Santa María de la Providencia) intervienen de forma articulada para brindar acompañamiento humano y profesional en terapias de Psicología, Terapia ocupacional, Fonoaudiología, Fisioterapia, Educación Especial, procesos artísticos (Teatro y Danzas) y de entrenamiento deportivo.
Terapéuticos
Los procesos terapéuticos se desarrollan bajo el enfoque de Rehabilitación Basada en Comunidad (RBC), promoviendo el bienestar, la autonomía y la inclusión de las personas con discapacidad. A través de procesos grupales e interdisciplinarios en áreas como fonoaudiología, fisioterapia, terapia ocupacional y psicología, se fortalecen las habilidades comunicativas, motoras, emocionales y funcionales.
Artísticos
Las expresiones artísticos de la Fundación integran la danza, el teatro, y la música como medios terapéuticos y formativos que estimulan la creatividad y la identidad personal. A través de proyectos grupales los beneficiarios desarrollan sus capacidades cognitivas, expresivas y emocionales, fortalecen la confianza en sí mismos y encuentran en el arte un espacio para conectarse, crear y compartir.
Deportivos
Las actividades deportivas promueven la actividad física, la salud y la integración social mediante la práctica del movimiento y el juego. A través de programas de entrenamiento, recreación y natación , se fortalecen la coordinación, el equilibrio, la resistencia y el trabajo en equipo, generando hábitos saludables y bienestar físico.
Espirituales
La espiritualidad en la Fundación busca fortalecer la dimensión interior y el crecimiento personal de cada beneficiario. A través de espacios de reflexión, oración, convivencia y acompañamiento grupal, se promueven la fe, la esperanza y el sentido de vida.
